Foro LoQUo

Asimov escribió: Lun Mar 10, 2025 7:31 pm Sí, no solamente son de derechas sino que sólo hacen "humor de derechas".

Y claro, como casi todos los cómicos militantes (ya sean de izquierdas o de derechas), apenas tienen gracia. Salvo para la gente fanatizada de derechas, claro, que le hace gracia cualquier chorrada siempre y cuando consista en criticar a la izquierda.

Zeta escribió: Mar Mar 11, 2025 9:41 am "Quequé" es de "izquierdas", te hace "gracia"? ah! y un tal "Charisteas" también... (abundan en ambas esferas, "Los Meconios" son irónicos)

Asimov escribió: Mié Mar 12, 2025 6:50 pm Tanto Quequé como Broncano me hacían gracia en La Vida Moderna, donde eran más frescos y formaban un buen equipo cómico con Ignatius. Hoy ya son simples bufones de la corte de Sánchez. Al tal Charisteas no tengo el gusto de conocerle.

Pero me temo que no he debido explicar bien el punto de lo que digo. A mí me da exactamente igual si un humorista o cómico es de derechas o de izquierdas. Josema Yuste es de derechas, pero cuando estaba en Martes y Trece tenía gracia. Y no lo digo porque por entonces no mostrase sus simpatías políticas, Mingote era de derechas y hacía muchas viñetas con chistes claramente de derechas (y algunas tenían mucha gracia, de hecho).

El problema no es ser de derechas ni, por serlo, hacer de vez en cuando chistes políticos de derechas. El problema es ser un humorista militante de derechas o de izquierdas, es decir, un humorista que se dedica exclusivamente a hacer chistes políticos y de su cuerda. Ser un propagandista humorístico, vaya. Esa gente son un coñazo que generalmente sólo hacen gracia a los fanáticos de su cuerda (como es el caso de los Meconios). E insisto: los hay de izquierdas (o de "izquierdas") y los hay de derechas.

Zeta escribió: Mié Mar 12, 2025 7:18 pm Bastante de acuerdo, pero por ejemplo Broncano está en la tele de Sánchez y (por lo que se) Los Meconios van "de por libres"...

Asimov escribió: Mié Mar 12, 2025 7:30 pm Sí, ser un humorista militante no necesariamente implica estar subordinado a un poder determinado (aunque siempre es peor estarlo, claro). Hay humoristas militantes de ideología comunista, por ejemplo, que no están a sueldo de nadie pero son igual de estomagantes que los de derechas.

No sé ahora, pero en su día los Meconios salieron de El Gato al Agua y ese círculo, bien situado económicamente y relacionado con el PP y Vox.